jueves, enero 01, 2009

Hace cuatro siglos




Efectivamente. Va a hacer cuatrocientos años desde que Galileo Galilei tuviera la maravillosa idea de dirigir su "mágico tubo" al cielo. Y sus ojos quedaron automaticamente hechizados por lo que se veia a través de aquel imperfecto telescopio lleno de colorines y aberraciones. Júpiter era un sistema planetario en miniatura; Saturno tenia "asas"; Marte era una pequeña esfera roja; Venus tenia "cuernos" como la Luna. . . Y en la Luna había montañas, desfiladeros, rios, mares. . . !La locura!
Desde aquel instante todos hemos querido estar mas cerca del cielo. Mas cerca de los misterios que entraña el descubrimiento del Universo.
Desde aquel pequeño tubo hemos caminado hasta el Hubble, hemos mandado sondas mas allá de Saturno; sabemos como suena Titan; hemos pateado la Luna; tenemos inquilinos en Marte; realquilados en Venus, e incluso hemos sabido colocar en órbita a la ISS, trampolín de acceso a nuevos hitos interplanetarios.Y como buenos y agradecidos alumnos del Maestro pisano hemos declarado el año que hoy comienza como Año Internacional de la Astronomía.
Sin embargo hay un detalle que no se entiende: ¿Como es posible que cada día que pasa intentemos eliminar el cielo negro de nuestras ciudades y pueblos? ¿Como es posible que se tenga que luchar contra la contaminación lúminica tan atroz que nos invade sin una legislación válida y universal? ¿Como es posible que malgastemos nuestro dinero en tirar millones de fotones a nuestra polucionada atmosfera ciudadana?. . . . .
2009, Año Internacional de la Astronomía: É vero?